Sergio Pavo Durán: «Si estoy aquí es porque soy bueno»

Sergio es un chaval de Alburquerque, de 11 años de edad, que está viviendo un sueño: llegar a ser algún día futbolista profesional.

Fue su abuelo, Kiko Durán, vieja gloria del fútbol local, quien le «inoculó el veneno» del fútbol. Desde ese momento la vida de Sergio Pavo Durán ha estado ligada a este deporte, primero en las categorías de base del CPA, hasta que ojeadores del CD Badajoz se fijaron en él fichándolo para el equipo alevín de primer año en la temporada 2021/2022, y de ahí dar el salto al Sevilla CF, donde actualmente milita. Estudia en un colegio bilingüe, se aloja en la residencia del club y entrena en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, en Dos Hermanas, «unas instalaciones espectaculares de donde han salido grandes estrellas», nos cuenta, añadiendo que la formación deportiva va en paralelo a la personal. «Mis entrenadores insisten en que sea respetuoso con el rival y con los compañeros y que sea constante, que trabaje duro, que me esfuerce para ser mejor».

Desde el primer momento ha contado con el apoyo de sus padres, Sergio y Mónica, quienes lo acompañan cuando les es posible a los torneos que disputa su equipo por toda la geografía española. «El pasado fin de semana estuvimos en Madrid y nos fue bien. En dos semanas jugaremos un torneo en Barcelona, y también vamos a ir fuera, a Marsella, a Orlando...».

Futuro

Aunque reconoce que le cuesta estar separado de su familia y amigos, Sergio lo tiene muy claro. «Si quiero llegar a ser profesional algún día tengo que pasar por esto», señala confiado en sus cualidades, «soy alto, fuerte y rápido», condiciones idóneas para ser un buen central, su demarcación favorita. No obstante su jugador en activo predilecto, en el que se fija como ejemplo a seguir, es Éder Militão, central brasileño del Real Madrid, que reúne esas características, mientras que del Sevilla sigue con especial atención al también brasileño Marcão, al que ha tenido ocasión de ver jugar en más de una ocasión en el Sánchez Pizjuán.

Su equipo, alevín de segundo año, está encuadrado en la primera andaluza, compartiendo liga con rivales como el Betis, o el Cádiz. «El nivel es muy alto, y de aquí salen muy buenos futbolistas». Sergio ha fichado por tres años con el equipo hispalense del que es titular. «Después ya veremos, me queda mucho, pero por ganas no va a ser», responde cuando le preguntamos por su futuro, consciente del valor que tiene estar donde está, a donde tantos canteranos aspiran llegar.

Por último Sergio nos habla de su hermano Álvaro, de 7 años,  otra «perla» de la cantera del Alburquerque, quien sigue sus pasos, «porque es muy bueno, más ofensivo que yo,  mediocentro quizás, y el Badajoz ya ha contactado con mis padres».

Mucha suerte para ambos, el futuro es vuestro.